Así pueden entrenar los nadadores tras el cierre de las piscinas por el COVID-19. Red Piscinas tienda online

Con el cierre de las mayorías de piscinas y las recomendaciones de Sanidad de salir lo menos posible de casa y no ir al gimnasio, los nadadores tendrán que ingeniárselas para seguir con su rutina deportiva.

 

La crisis del coronavirus está afectando a la vida cotidiana en maneras que hace menos de un mes eran inimaginables. Desde la suspensión de todo el deporte hasta el inminente cierre de lugares de ocio, sin contar las recomendaciones del Gobierno de permanecer en casa lo máximo posible.

Uno de los sectores más afectados por estas medidas es la natación. Con los cierres de las piscinas, los nadadores, a no ser que dispongan de una en casa, tendrán que tirar de ingenio para poder entrenar.

Uno de los mayores problemas para los nadadores que están tiempo sin entrenar es la pérdida de la velocidad máxima. Para ello, lo más recomendado es el trabajo de fuerza. Al no disponer en estos tiempos de gimnasios, los ejercicios de alta intensidad y con velocidad constante son los más recomendados.

 

También las carreras son buenas para mejorar la fuerza específica y a través de la mejora de la zancada, se podrá economizar mejor la resistencia en las carreras.

Será indispensable en estos tiempos tener bandas elásticas para distintos ejercicios y de distinta rigidez. Por ejemplo, para seguir con el entrenamiento de piernas, unas bandas resistentes pueden servir para hacer sentadillas o presión de piernas.

Estas bandas también servirán para fortalecer los brazos. Con bandas rígidas se pueden simular movimientos muy similares a los que se realizan en una carrera de natación en cualquiera de sus estilos.

fuente: 20minutos.es